¿Se puede tomar café durante la lactancia materna?
Si eres de esas personas que disfruta con una buena taza de café cada día y tienes en mente dar el pecho próximamente o estás haciéndolo en estos momentos, es muy probable que te preguntes: “¿puedo tomar café dando el pecho?, ¿es malo tomar café durante la lactancia?, o ¿son incompatibles la cafeína y la lactancia?”
La Asociación Española de Pediatría (AEP) y la Asociación Americana de Pediatría (AAP) coinciden en que sí se puede tomar café en la lactancia, salvo que un profesional de la salud determine lo contrario, ya sea por la salud de la madre o del bebé. Eso sí, se recomienda hacerlo en cantidades moderadas o decantarse por variedades que no contengan cafeína o la contengan en dosis reducidas, como los Descafeinados NESCAFÉ® Dolce Gusto®.
“¿Cuánto café puedo tomar en la lactancia?”
Ahora que sabemos que en la lactancia se puede tomar café, es momento de descubrir qué cantidades máximas son las recomendadas. En este sentido, la European Food Safety Authority (EFSA) señala que lo más apropiado es no consumir más de 200 mg de cafeína al día.
Hay que tener en cuenta que cada variedad y tipo de café contiene una cantidad diferente de cafeína. Por ejemplo, tal y como vimos en nuestro artículo sobre el consumo de café durante el embarazo , la EFSA indica que una taza de café espresso de 60 ml contiene aproximadamente 80 mg de cafeína, mientras que un café americano de 365 ml contiene 154 mg de este estimulante. Así pues, siguiendo las recomendaciones de la AEP, sí se puede tomar café amamantando, siempre que no se supere la cantidad recomendada de 200 mg, o lo que es lo mismo, un máximo de dos tazas diarias según la variedad que se consuma. Por el contrario, si se excediera esta cantidad, parte de la cafeína que ingiere la madre, y que se transfiere a su leche, podría afectar al lactante, causándole irritabilidad, insomnio o nerviosismo, entre otros síntomas.
Si crees que ya sabes la respuesta a la pregunta “¿puedo tomar café en la lactancia?”, es posible que aún dudes sobre si es mejor espaciar las tomas al bebé tras su ingesta. Debes saber que, aunque en las cantidades moderadas anteriormente citadas el café no debería tener efectos sobre el lactante, cada niño es diferente y puede ser que tu bebé sea más sensible a la cafeína. Es por ello que, si crees que la cafeína en pocas cantidades afecta a tu hijo, pero no quieres renunciar al café con cafeína, ¡tenemos buenas noticias para ti! En este caso, una estrategia que se puede utilizar es esperar para dar el pecho tras beber café hasta que la cafeína se haya eliminado prácticamente por completo del cuerpo, es decir, unas 4 o 5 horas.
¡Disfruta del café y la lactancia materna!
Ya lo ves: las autoridades sanitarias no desaconsejan el consumo de café en la lactancia con un recién nacido siempre que no se tomen más de dos o tres tazas diarias o que, en su defecto, se apueste por variedades descafeinadas. ¡Puedes seguir disfrutando de tus momentos cafeteros favoritos con las cápsulas NESCAFÉ® Dolce Gusto® mientras le das el pecho a tu bebé! Recuerda, sin embargo, que nadie podrá aconsejarte mejor sobre el consumo de café o cualquier otro alimento o bebida durante la lactancia que tu profesional sanitario de confianza, pues estudiará tu caso concreto y te dará unas pautas personalizadas a seguir